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Pasado y Presente

mayo 8, 2017 blog, Reflexiones Desconocidas

El hecho de haber escogido esta localización para esta foto me hace pensar si quiero hablar de cosas diferentes, toda reflexión incluye la memoria, el pasado, el presente, y ese futuro incierto que nadie conoce. Aunque con esta foto no pretendía hablar de esto, me ha despertado las ganas de recordar y hablar de este lugar tan especial.

Este es el momento presente de lo que fue el hogar de mi abuelo durante muchos años, “El Quinto”, en esta casa vivió hasta que se casó; Mi abuela, mi madre y mis tías iban a vivir por temporadas, siempre nos han contado muchas historias, un invierno se quedaron incomunicados por una nevada de casi un metro, mi tía Angustias no tendría más de 2 años, luego iban todos los veranos en la época de la siega y la trilla.

Cuando éramos pequeños nos reuníamos toda la familia para ayudar a mi abuelo a recoger aceitunas, almendras e incluso azafrán, comíamos gachas o cualquier guiso que mi abuela hiciera en la chimenea, cargábamos espuertas, jugábamos con sus perros, Canuto, Chiqui, Rocky, bajábamos corriendo por los campos llenos de cardos secos que tumbábamos con nuestros palos motivados por alguna película como Conan.

Poco a poco todos nos fuimos haciendo mayores, mi abuelo fue dejando de subir, y los demás no queríamos hacer ese duro trabajo que el hacía todo el año cuidando sus olivos y almendros, Cuenca creció y se construyeron nuevas casas y calles no muy lejos de El Quinto, estando mucho más cerca de la ciudad el vandalismo y los destrozos no tardaron en llegar, deteriorándose poco a poco hasta quedar como la podéis ver ahora, aunque albergando esa extraña belleza de lo que trae buenos recuerdos, aun estando roto.

El futuro es incierto, como siempre, esa ventana no habla mucho, pero permite asomarse a la luz, que agita la polvareda acumulada en el tiempo, y nos hace pensar.

pasado y presente

Enjoy,

Jorge

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1 comment

  1. Me he emocionado leyendo lo que ha escrito Jorge sobre el Quinto, ese sitio maravilloso donde he vivido mi niñez con mis primos y mis hermanos, soy su madre y los recuerdos que tengo de ese valle precioso, lleno de olivos, almendros, higueras…. son maravillosos. En los veranos recuerdo las siestas que nos obligaban a echarnos y como veíamos la sombra de mi abuelo sobre las paredes mientras él estaba trillando en la era. También recuerdo el olor del cafe del puchero por las mañanas y las historias que nos contaba mi abuelo alrededor de la lumbre a la luz del candil, el ordeño de las cabras y esa leche que nos hervía mi abuela y las roseras que eras señoras que contrataba para sacar las hebras de las risa del azafrán, los montones de rosas moradas que era un estallido de color; y las matanzas del cerdo y el columpio entre los arboles al lado del pozo Y lo que recuerdo con muchísimo cariño son las conversaciones de mi abuela Antonia de camino hacia el Quinto con los burros y sobre todo la parada en la fuente Del Canto.
    Ahora solo quedan cuatro paredes de esa casa que Jorge con esta fotografía ha conseguido remover todos los maravilloso recuerdos de mi niñez.
    GRACIAS !!

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